Arrancamos después de una larguísima parada, pero volvemos a lo grande, con una recomendación inmensa. Aunque la mayoría de animes que he criticado hayan sido de deportes, creo que este es el primero que se trata de un deporte individual: el boxeo. Así que preparaos para uno de los mejores animes de deportes que he visto hasta la fecha: 'Hajime no Ippo'.
¿De qué va?
¿De qué va?
Makunouchi Ippo es un chaval como otro cualquiera, al que los matones de su instituto pegan. Un día, se encuentra con Takamura, una joven promesa del boxeo japonés, quien da la cara por él contra unos matones de instituto. A partir de este punto, Ippo querrá hacerse boxeador y hacerse más fuerte.
La crítica
A día de hoy, Hajime no Ippo ha entrado en mi top 3 de animes de deportes con 'Slam Dunk' y 'Haikyuu!!'. ¿Y por qué? Porque tiene todo lo necesario para triunfar y conquistar a millones de espectadores: buena historia, mejores personajes, gran ambientación y, como no, humor japonés del bueno.
La serie se centra en la trayectoria de Makunouchi, el cual irá escalando poco a poco hasta alcanzar lo más alto. El anime se basa precisamente en las batallas de Ippo en su carrera, los obstáculos que se le presentan y como adaptarse para poder evolucionar y pasar por ellos.
Aunque parezca mentira, poco a poco te vas enganchando al argumento. Empiezas con la pelea de un pringado al que nadie hace caso y terminas animandolo para que logre sobrevivir dentro del ring. Algunas veces tal vez grites, otras te encojas... Este es el autentico estilo de 'Hajime no Ippo'.
Makunouchi no es el tipo fuerte que todo el mundo ve en los animes, ni un gamberro, es un tipo corriente, bueno, que ayuda a su familia, a sus amigos, honesto. Tal vez por eso nos gane como personaje, por su cambio de personalidad fuera y dentro del ring. Gracias a sus aptitudes es un protagonista ejemplar, de esos que se apoyan en sus secundarios pero nos dan numerosos motivos para seguir viéndole luchar.
No obstante, por mucho que la serie se centre en Makunouchi, tenemos otros personajes a los que, en más de una ocasión, se les da mucho protagonismo. Empezando por sus compañeros de gimnasio: Takamura, Aoki y Kimura. Con ellos, además de peleas de lo más variopintas (la mayoría de ellas son totalmente cómicas), tenemos momentos de auténtica risa. De hecho, además de ser uno de los mejores animes de deportes que he visto, es uno de los mejores en cuanto a comedia.
Tal vez este sea uno de los factores por la que más recomiendo la serie, ya que se mantiene entre los combates y los momentos de humor. El espectador desea, a partes iguales, esos capítulos de intensa tensión dentro del cuadrilátero y esos en los que sabes que algo gordo va a pasar y que tú vas a estar ahí para partirte la caja.
Además de los compañeros de gimnasio, tenemos a los boxeadores con los que Ippo se va enfrentando. Es curioso, porque siempre que crees que ya lo has visto todo, sacan un nuevo oponente que le pone las cosas difíciles a Ippo y eso es lo que queremos, que no todo sea fácil. Lo mejor de todo es que no desaparecerán, siempre volverán y, como los compañeros de gimnasio de Ippo, también reclamarán su parte de protagonismo.
En cuanto a la parte técnica... Puedo afirmar abiertamente que la banda sonora es una pasada. Los openings tienen buenos temas y las melodías que acompañan a la animación te meten de lleno en el mundo del boxeo. De hecho, quiero hacer una mención especial a ese riff que suena constantemente cuando la cosa se pone emocionante, que nos pica aún más (por si no fuera poco).
Su animación a día de hoy no ofrece mucho. Hay que tener en cuenta que se trata de un anime que empezó a retransmitirse en 2000 y los avances son notorios. Cualquiera que haya visto 'Fate/Zero' sabe de lo que hablo. Sin embargo, no hace daño a nadie... bueno, a veces si hace daño, puesto que la animación se vuelve algo simplona en algunas ocasiones.
Sé que tal vez cueste ponerse a ver un anime de más de setenta capítulos ahora, puedo entenderlo, pero... Vale mucho la pena. Hacía tiempo que no me enganchaba tanto a algo y quería más y más. Si os la acabáis viendo, os aseguro que valdrá mucho la pena.
A día de hoy, Hajime no Ippo ha entrado en mi top 3 de animes de deportes con 'Slam Dunk' y 'Haikyuu!!'. ¿Y por qué? Porque tiene todo lo necesario para triunfar y conquistar a millones de espectadores: buena historia, mejores personajes, gran ambientación y, como no, humor japonés del bueno.
La serie se centra en la trayectoria de Makunouchi, el cual irá escalando poco a poco hasta alcanzar lo más alto. El anime se basa precisamente en las batallas de Ippo en su carrera, los obstáculos que se le presentan y como adaptarse para poder evolucionar y pasar por ellos.
Aunque parezca mentira, poco a poco te vas enganchando al argumento. Empiezas con la pelea de un pringado al que nadie hace caso y terminas animandolo para que logre sobrevivir dentro del ring. Algunas veces tal vez grites, otras te encojas... Este es el autentico estilo de 'Hajime no Ippo'.
Makunouchi no es el tipo fuerte que todo el mundo ve en los animes, ni un gamberro, es un tipo corriente, bueno, que ayuda a su familia, a sus amigos, honesto. Tal vez por eso nos gane como personaje, por su cambio de personalidad fuera y dentro del ring. Gracias a sus aptitudes es un protagonista ejemplar, de esos que se apoyan en sus secundarios pero nos dan numerosos motivos para seguir viéndole luchar.
No obstante, por mucho que la serie se centre en Makunouchi, tenemos otros personajes a los que, en más de una ocasión, se les da mucho protagonismo. Empezando por sus compañeros de gimnasio: Takamura, Aoki y Kimura. Con ellos, además de peleas de lo más variopintas (la mayoría de ellas son totalmente cómicas), tenemos momentos de auténtica risa. De hecho, además de ser uno de los mejores animes de deportes que he visto, es uno de los mejores en cuanto a comedia.
Tal vez este sea uno de los factores por la que más recomiendo la serie, ya que se mantiene entre los combates y los momentos de humor. El espectador desea, a partes iguales, esos capítulos de intensa tensión dentro del cuadrilátero y esos en los que sabes que algo gordo va a pasar y que tú vas a estar ahí para partirte la caja.
Además de los compañeros de gimnasio, tenemos a los boxeadores con los que Ippo se va enfrentando. Es curioso, porque siempre que crees que ya lo has visto todo, sacan un nuevo oponente que le pone las cosas difíciles a Ippo y eso es lo que queremos, que no todo sea fácil. Lo mejor de todo es que no desaparecerán, siempre volverán y, como los compañeros de gimnasio de Ippo, también reclamarán su parte de protagonismo.
En cuanto a la parte técnica... Puedo afirmar abiertamente que la banda sonora es una pasada. Los openings tienen buenos temas y las melodías que acompañan a la animación te meten de lleno en el mundo del boxeo. De hecho, quiero hacer una mención especial a ese riff que suena constantemente cuando la cosa se pone emocionante, que nos pica aún más (por si no fuera poco).
Su animación a día de hoy no ofrece mucho. Hay que tener en cuenta que se trata de un anime que empezó a retransmitirse en 2000 y los avances son notorios. Cualquiera que haya visto 'Fate/Zero' sabe de lo que hablo. Sin embargo, no hace daño a nadie... bueno, a veces si hace daño, puesto que la animación se vuelve algo simplona en algunas ocasiones.
Sé que tal vez cueste ponerse a ver un anime de más de setenta capítulos ahora, puedo entenderlo, pero... Vale mucho la pena. Hacía tiempo que no me enganchaba tanto a algo y quería más y más. Si os la acabáis viendo, os aseguro que valdrá mucho la pena.
Información de más
- Actualmente su manga está en publicación desde hace más de veinte años.
- A día de hoy, existen dos OVAS y dos temporadas (secuelas) de 24 capítulos cada una.
- Se cree que el estilo de lucha personaje de la saga de videojuegos Tekken, Steve Fox, se basa en el de Makunouchi Ippo.
Nota final: 9
No me gustaron las victorias predecibles
ResponderEliminarwww.marca.es pelo
ResponderEliminarMe encanta que sigamos adelante con cada una de las cosas que me gustan, sobre todo el estrenos hentai, que es un anime bastante divertido.
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