El viaje de Chihiro [Cine]

Como todos hemos sido pequeños alguna vez, sabemos que es que un padre te dé la bronca: haz esto o no hagas aquello, no molestes a los mayores, etc. Sin embargo, pocos son los niños que tienen que sacarles las castañas del fuego a sus padres frente a sus erróneas decisiones. Chihiro es un claro ejemplo de ello y lo hemos comprobado en la película de Hayao Miyazaki: El viaje de Chihiro. 

¿De qué va?

Chihiro y su familia están a punto de mudarse. De camino a su nuevo hogar, se pierden y acaban en una especie de parque temático que parece estar abandonado. Una vez allí, sus padres encuentran un puesto de comida y se sirven sin preguntar a nadie. Chihiro, a quien no le acaba de gustar la idea descubre que ese lugar no es lo que parece ser, al anochecer aparecen cantidad de criaturas de lo más extravagantes y, sin saber cómo, encuentra que sus padres se han transformado en cerdos. Con la ayuda de Haku y algunos amigos que irá haciendo, Chihiro tendrá que hacer lo posible para poder traer de vuelta a sus padres y regresar al mundo humano.

La crítica

Es interesante las repercusiones que pueden llegar a darse por hacer aquello que no se debía, seguramente si un ladrón o un asesino supiese que al cometer un delito se transformaría en un cerdo, se replantearía la situación. Lo más curioso es que muchas veces no pensamos en que puede acabar una acción cotidiana cualquiera, como lo puede ser ver la televisión o conducir hasta el trabajo. La familia de Chihiro, inconsciente de ella, vaga por tierras desconocidas haciendo lo que se les antoja, sin necesidad alguna de preguntar y al final, sin saber porqué, su hija acaba inmiscuida en un problema del cual ella no ha hecho absolutamente nada.

El viaje de Chihiro nos hace ver una realidad ficticia a través de un error de los padres de Chihiro y que está tendrá que solucionar. Hablo de ficción ya que esta acaba en un mundo paralelo al nuestro donde la magia y los sapos parlantes tienen cabida. Así que en resumidas cuentas, la película hace un intercambio de papeles entre Chihiro y sus padres: ella hará de adulta y asegurará su seguridad mientras que los padres, involuntariamente, le acarrean un problema inmenso.

A partir de entonces todo es válido y Chihiro se las tendrá que arreglar para subsistir y salir de ese extraño mundo del cual no conoce nada. A través de la amistad de Haku, quien parece ser que conoce de toda la vida, Chihiro conocerá a mucha gente para poder conseguir un trabajo y solucionar sus problemas. Asimismo Chihiro abre los ojos y se da cuenta que aunque se muden a otro lugar, ella será capaz de adaptarse a otro ambiente, por mucha lástima que le dé dejar a los suyos atrás.

La película en si se pasa muy rápida, ya que no dejan de meter a Chihiro en diferentes embrollos con diferentes personajes y la situación en sí es de lo más original. Gracias a la combinación de los diferentes elementos como el toque cómico y esa historia de amor (que gracias a Dios, no es muy empalagosa), la cinta se puede disfrutar tengas la edad que tengas. Entre otras cosas, tenemos la oportunidad de ver, como ya he dicho, a una niña ejerciendo un papel más adulto y eso gusta tanto a pequeños como a mayores, sumando la evolución general que hace Chihiro hacia ese mundo desconocido.


Por si no fuese suficiente, el arte que tiene el Studio Ghibli con sus animaciones es digno de elogio, tanto en la elaboración de estas como en los cambios de paisajes y colores. Hay muchísimas escenas en las que dudas hasta qué punto puede ser animaciones o no, no me refiero a los personajes en sí, sino más bien en los paisajes.

También hay que hacer lugar a la banda sonora, quien en muchas escenas nos acompaña de tal manera, que creemos estar viendo lo que sucede. Por ejemplo, la escena en la que Chihiro baja por las escaleras hasta la sala de calderas (por nombrar una de muchas), está muy bien coordinada y que sin esa música, la escena perdería muchísimo valor y en consecuencia, toda la película.

Es normal que se considere la mejor película de esa década, porque al fin y al cabo, es innovadora y llevadera. Pese a eso, no he conseguido engancharme hasta el final y tampoco sentir lo que sentían sus protagonistas, no es precisamente próxima. Pero no por ello no es mala película, tan solo que a cuestión de gustos... 

Información de más
  • Ganó un Oscar a mejor película de animación en 2003 (pese haber sido estrenada en 2001). 
  • También obtuvo el oso de oro del Festival de Berlín en 2001 como mejor película.
  • Es la decimotercera película del Studio Ghibli. Tan solo dos de las películas del estudio de animación japonés son consideradas cine de culto, La Princesa Mononoke fue la primera, siendo esta la segunda y última (por el momento).
Nota final: 8

Tirso Vargas

3 comentarios:

  1. La 5ª foto con el monigote? Mi profesor de historia del arte es IGUAL xDDDDDDDDDD! A mí esta peli me gustó pero le pondría un 7.

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    1. Pobre profesor de historia del arte! Aunque bien mirado, puede considerarse afortunado, ha salido en una película Ö

      Y sobre la nota estuvé meditando si 7 u 8, solo que siempre he dicho que la nota mínima para una buena película siempre es de 7, si sale de la media, ya puede empezar a subir. En este caso se sale bastante de la media ;)

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  2. A mi me encanta esta película *_*
    Es cierto que el final es un poco en plan de ¿wft? Raro podríamos decir XD, pero a pesar de eso, tiene algo mágico el film que me encantó :D

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